miércoles, 16 de junio de 2010

Temuco, fragancias a madera y raíces


La húmeda fragancia del sur es también madera, poesía, cultura originaria y modernidad.


Entre las ciudades más pobladas del país, Temuco es la más joven. Se encuentra a 677 kilómetros de Santiago y fue fundada en 1881 luego de un largo y difícil proceso de acuerdo con el pueblo mapuche, habitante ancestral de esos territorios. A partir de entonces se vivió un rápido crecimiento, fortalecido por colonos europeos, especialmente alemanes como Teodoro Schmidt, quien trazó el plano urbano de la pujante ciudad.
 

Las raíces mapuches, germanas y chilenas se manifiestan vívidamente todos los días. Especialmente las del pueblo originario, que suele reclamar aún su derecho sobre algunas tierras de la región de la Araucanía. El visitante puede visitar museos, admirar la orfebrería en plata mapuche, comer en restaurantes que reproducen lo más típicamente alemán o probar la gastronomía criolla sazonada con merkén, el ají picante de los mapuche; y también conocer las modernas zonas residenciales de la ciudad, los shoppings y las shoperías con evidente influencia germana.


Temuco es la ciudad de la lluvia. No es la más lluviosa del país pero la poesía de Neruda, que vivió allí su infancia, contribuyó a tejer esa imagen. Temuco es también la ciudad de los techos de zinc, para que en ellos cante la lluvia. Y de las chimeneas que empapan todo con olor a leña quemada. Sin embargo, el verano reserva cálidas temperaturas que aconsejan visitar los lagos cercanos, como el (Villarrica), o Puerto Saavedra, en la costa del océano Pacífico.
Atractivos de la ciudad
Cerro Ñielol: A cinco minutos del centro de la ciudad. Es un Monumento Natural de 90 hectáreas de vegetación, con un 60% de especies nativas entre las que destaca el copihue, la flor nacional. A sus pies se firmó en 1881 el parlamento de Paz entre mapuche y chilenos. Constituye un buen paseo, y ofrece cinco senderos para caminatas, áreas de picnic y espectaculares miradores sobre la ciudad. Para los más activos hay canopy. 
Mercado: Ocupa prácticamente una manzana del centro de la ciudad y está dividido en tres sectores: artesanías, restaurantes y venta de comestibles. Es algo así como un microcosmos de la región. Se encuentra de todo, es el lugar preferido por los visitantes que buscan tejidos mapuches, aros de plata, instrumentos musicales y adornos varios. Se recomienda no pasar por alto los restaurantes ni los platos tradicionales, en especial el afamado restaurante Criollito.

Museo Regional: Está ubicado en la antigua casona de Carlos Thiers, declarada monumento nacional en 1997. Fue elegida para preservar parte de la cultura regional en 1940. Hay muestras arqueológicas, etnográficas, pictóricas, fotográficas e históricas, desde el año 1400 hasta el 1800, con más de 3.000 objetos exhibidos. Uno de los patrimonios que más se destaca es la colección de textiles y joyas mapuches que datan del siglo XIX.


Casa de la Mujer Mapuche: Ofrece una completa muestra de artesanía en lana mapuche de la región. El lugar fomenta la producción y comercialización de artesanía textil, alfarería y orfebrería. Conserva las técnicas originales transmitidas por generaciones y que son parte del patrimonio mapuche. Hay vestidos, faldas, charpes y ruanas, tejidos a telar con teñido natural, al igual que ponchos tejidos a palillo con lana de oveja natural. 


martes, 1 de junio de 2010